La última pataleta de Apple
Parece que Apple está dispuesto a que sus dispositivos sean los más populares del mercado, aunque las prácticas que están empleando para ello en un principio no son todo lo éticas que se podría esperar.
El perfecto ejemplo lo tenemos en el último “culebrón Apple”, que consiste en la denuncia efectuada en contra de Samsung para que éste frene la distribución del tablet Samsung Galaxy Tab 10.1 en Estados Unidos, algo que al menos de momento, ha conseguido.
Así lo dicta una orden judicial, por la cual Samsung deberá dejar de vender el Galaxy Tab 10.1 en USA de forma cautelar, hasta que se llegue a una decisión por parte del tribunal. De demostrarse que las denuncias de Apple no son infundadas, Apple debería de abonar 2.6 millones de dólares a Samsung.
Por el momento Apple ha conseguido lo que quería, pues este tablet es uno de los principales competidores de su iPad, por lo que esta situación beneficiará enormemente a la empresa de Cupertino.